La iniciativa apunta a “crear el Fondo Federal Salarial Estatal destinado a empleados públicos de administraciones nacional, provinciales y municipales”.
El secretario adjunto nacional de ATE, Rodolfo Aguiar, sugirió la restitución del impuesto al champagne y la implementación de un gravamen a las herencias para “lograr una recuperación real de los ingresos en el sector público”. “Se deben abandonar las políticas de corto plazo y pensar en la creación de un Fondo Federal Salarial Estatal que esté integrado por lo recaudado bajo estos conceptos», exigió.
«Se debe restablecer el impuesto al champagne que fue eliminado durante la gestión macrista y además comenzar a gravar las herencias o transmisión gratuita de bienes, tributo éste que rige en varios países y que aquí fue derogado durante los primeros días de la última dictadura militar», explicó. Distintas provincias intentaron implementar esta última medida, pero sólo en Buenos Aires sigue vigente desde 2013. Allí actúa sobre herencias superiores a 200 mil pesos, en tanto sean herederos directos, y aplica un 4% sobre el excedente de esa suma. En el resto de los casos, este porcentaje rige a partir de 50 mil pesos y se atribuye al total.
Aguiar señaló que «los salarios de los estatales fueron destruidos durante los últimos años y existe mucha disparidad entre las administraciones nacional, provinciales y municipales” y que para ello se deben “abandonar las políticas de corto plazo y pensar en la creación de un Fondo Federal Salarial Estatal que esté integrado por lo recaudado bajo estos conceptos». Según datos del Ministerio de Hacienda en 2018, existen 198.836 empleados de la administración pública nacional; 2.366.599 provinciales; y 596.812 municipales.
«La producción y exportación de litros de espumantes han experimentado un fuerte crecimiento en la última década. Si se vuelve a aplicar la histórica retención del 12%, se podrían recaudar varios miles de millones de dólares y lo mismo ocurriría con el impuesto sucesorio. En este último caso, hay que diferenciar herederos directos de los indirectos para definir el monto sujeto a gravamen y la modalidad de aplicación del mismo. No sería descabellado pensar que se instrumente cuando la suma supere los 500 mil pesos», detalló.
Algunos países donde se aplica el impuesto a las transmisiones patrimoniales son Estados Unidos, Francia, Japón, Suecia, Reino Unido, España, Chile, Brasil y Uruguay. En este último, la tasa es del 3% para los herederos directos y 4% para los restantes. Por su parte, la industria del champagne tuvo un fuerte crecimiento durante las últimas décadas, pasando de ser 59 bodegas las que produjeron 18 millones de litros en 2005, a 165 las que generaron 42 millones de litros en 2014. Un aumento del 109% en 10 años.
En base a la propuesta de un Fondo Federal del Salario Estatal, el adjunto de ATE analizó la situación del sector: «La Constitución nacional dice claramente que por igual tarea debe existir igual remuneración. Esto no existe en el Estado. Un trabajador municipal cobra dos o tres veces menos que uno provincial y hasta cinco veces menos que alguien que presta servicios en algún organismo nacional. Le tenemos que poner fin a esta discriminación y sólo podremos si pensamos en transformaciones profundas».
Aguiar concluyó que «el Estado presente que se demanda en plena pandemia, y que deberá fortalecerse aún más para ayudar a que el país supere el derrumbe económico y social, necesita trabajadores sin precarización laboral y plena jerarquización salarial». Ambas propuestas, sumadas a un posible gravamen a las grandes fortunas, permitirían una mayor redistribución de riquezas en el país.